¿Conoces el concepto ‘phygital’? Esto también se traslada al mundo de la colaboración…
La crisis sanitaria, de la que aún no hemos salido, nos ha planteado nuevas y diferentes formas de llevar nuestra cotidianidad y por supuesto esto se ha trasladado a nuestra vida laboral.
Muchos ya afirman que la gente se ha acostumbrado a teletrabajar y que los espacios físicos de oficina serán en su mayor parte innecesaria. Las evidencias detrás de esta controversial afirmación parece aplastante y aquellos que la defienden no dudan en citar unas declaraciones del 2020 del exitoso empresario y marcador de tendencias Warren Buffet en una de sus reuniones icónicas con sus inversores.
No es la primera vez que el sector inmobiliario está en la lupa, pues el cierre de establecimientos importantes del sector de venta al detalle en USA provocó una crisis a partir del auge de la venta por internet hace unos años. Por lo que parece simple poder comparar lo que sucedió en este sector, a raíz del auge de la venta digital, con el sector inmobiliario de alquiler de espacios de trabajo.
Como nos han leído o escuchado decir, el Covid 19 ha sido un gran acelerador de procesos de transformación que ya se venían “cocinando” y que puso de manifiesto tendencias que ya existían y que los clientes, quienes nos llevan muchos clics de ventaja, ya estaban adoptando, presionando así muchos sectores y modelos de negocios existentes.
No podemos dejar de lado en esta ecuación la importancia que le da el cliente 3.0 a la “experiencia”, siendo este un factor determinante hoy día para decidir una marca sobre otra, y esto se traslada íntegro al tema que nos ocupa.
En otras palabras, El covid-19 no se constituye en un factor disruptivo, sino en un acelerador de adopción de tendencias. O ¿hemos olvidado el auge pre-pandemia del modelo de co-working, o espacios colaborativos, que ya habían aterrizado en nuestro país?, siguiendo tendencias europeas y norteamericanas.
Estas tendencias incluso habían ya impactado en el sector de la construcción, arquitectura e interiorismo, al introducirse conceptos de transformaciones radicales a espacios de oficinas bajo el enfoque: “New ways of working”, que se refiere a nuevas formas como término general que cubre a las oficinas que utilizan una combinación de escritorios compartidos, áreas de reuniones ligeras, zonas de descanso compartidas por diferentes inquilinos y todos los demás diseños de oficinas que no se ajustan al molde típico de las estaciones de trabajo y las salas divididas. Los espacios de oficinas se dividen en tres clasificaciones de zonas de trabajo considerando como claves:
- La concentración como el estilo predominante que implica un escritorio, pero puede apoyarse en un área tranquila (biblioteca) o en un espacio cerrado más pequeño (una cabina). Resaltando el control del ruido y la interrupción en el uso útil del espacio.
- La colaboración es una parte importante del día. Históricamente centrados en una sala de reuniones, los diseñadores de oficinas colocan cada vez más espacios de reunión abiertos y parcialmente cerrados dentro de áreas de planta abierta. Esto funciona bien para reuniones menos formales o menos privadas y alienta al personal a utilizar los espacios de reunión de forma transitoria.
- La Consideración, o espacio para pensar, momentos del día en los que se necesita inspiración. El diseño de espacios de consideración generalmente implica techos más altos o espacio exterior, o crear un área que tenga menos límites.
- La Interacción social. La oficina también cumple una función social importante que es una parte valiosa del trabajo. Aunque las necesidades sociales son fáciles de descartar, muchas personas citan el aspecto social del trabajo como una razón clave para estar allí.
- La flexibilidad es un componente vital de New Ways. Los espacios ya no deben tener un solo propósito, incluso las estaciones de trabajo deben incorporar una expansión ad hoc y un alcance de colaboración, de modo que la oficina admita un trabajo adaptable, en lugar de dictar un modo de trabajo rígido. Un cambio sutil de propósito, con gran impacto en el negocio.
¿Por qué introducimos este concepto en el espacio del diálogo sobre el phygital?
La experiencia del colaborador es relevante en este escenario y las tendencias nos indican que no volveremos, muchos de nosotros a trabajar 100% como en el pasado, pero tampoco estaremos 100% en el modo virtual, porque pasada la crisis sanitaria querremos recuperar algo de normalidad y eso implica unas horas a la semana en la experiencia laboral de las oficinas presenciales.
¿Phygital? (acrónimo de Physical + digital) es un concepto que nace en el siglo XXI y de forma específica hace referencia a la presencia de una misma persona tanto en el mundo físico como en el digital …Por tanto debe existir la capacidad de identificación de la presencia de cada persona en ambos mundos. (fuente: Wikipedia)
Regresando al ejemplo del ‘retail’, esta experiencia ya conocida, nos puede ayudar a prever lo que ocurrirá en las oficinas. En este sector ya conocido, la evolución de los espacios hacia un modelo omnicanal ha facilitado que los clientes utilicen todos los medios a su disposición con naturalidad, ya sean canales presenciales o digitales. Incluso cuando el cliente está en una tienda, puede ejecutar su compra a través del móvil o en pantallas, estratégicamente colocadas para apoyar la migración a ese canal, como es el caso de muchas tiendas de la marca Nike.
La omnicanalidad también será elemento clave sobre la que pivotará el cambio en el modelo renovado de los espacios de trabajo. Así veremos como el colaborador de las empresas, un 70% de ellos ya Millenials, nativos digitales y early adopters de tendencias, o creadores de las mismas, decidirá cómo alternar el trabajo en espacio físico de oficina y el digital / virtual, que es el concepto que abordamos en este blog: el ‘phygital’ model, o la interrelación total entre estos dos elementos.
En esta nueva y marcada tendencia post pandemia, podremos decidir con absoluta flexibilidad y como parte de la nueva propuesta de valor de la experiencia de los colaboradores de las empresas punteras, si acudir a una oficina central, teletrabajar desde casa o conectarnos de forma virtual desde otro centro de trabajo, como un ‘coworking’.
Hay retos que superar en este modelo de trabajo omnicanal, que como en el modelo de venta al detalle, una mayor polarización entre oficinas ‘prime’ y aquellas que no cumplan con los requerimientos de los usuarios, será determinante para el éxito de la misma y otro, no menos importante, el superar los mitos que aún tenemos los líderes de las generaciones anteriores, sobre “cómo asegurar que nuestros colaboradores deslocalizados están 100% dedicados, en las horas laborales, al trabajo de nuestra empresa”. Esto es un cambio de cultura y son tendencias que vinieron para quedarse, nos conviene comenzar a trabajar en ello si hemos de querer atraer y retener a los mejores talentos disponibles.
La omnicanalidad supondrá una mayor necesidad de espacio neto para las corporaciones. Aunque haya un número menor de colaboradores, habrá menos densidad de puestos de trabajo, y mayores requerimientos de espacios de tecnología e innovación en las oficinas, por lo que fidelizar talentos con esta orientación profesional, será más relevante aún que lo que ha sido hasta hoy.
Vale decir que no estamos ante la desaparición absoluta de los espacios físicos de trabajo, si no que estamos observando, como protagonistas de nuestra propia película, la acelerada evolución de esta tendencia que ya conocíamos y que nos atrevemos a afirmar que no será como las que hemos dejado en la era pre pandemia, si no que serán espacios físicos mucho más completos, flexibles y, sobre todo, más humanos, garantizando que el colaborador, que es nuestro principal cliente: el interno, viva una experiencia memorable que lo fidelice, lo atraiga y lo convierta en un buen embajador de marca corporativa, de una organización que lo ha colocado en el centro de su estrategia de marca empleadora.
¡Hasta una próxima entrega!
Karil Taveras Caputo
CEL de ideox
La autora es mercadóloga de profesión, máster en marketing estratégico, magister en administración de empresas, experta en transformación digital / cultural, constructora de marcas y cirujana empresarial. Es Chief Executive Leader de ideox, firma boutique liderada por consultores expertos en redimensionar el mercado de las empresas a través de la transformación de modelos de negocios. Sus propuestas hacen énfasis en la comunicación y el marketing estratégico.